El Diario de Solrac

Sinopsis: "Publicado originalmente en JLA: Earth 2, septiembre de 2000. Ultraman, Owlman, Superwoman, Power Ring y Johnny Quick forman el Sindicato del Crimen de América, defensores, con superpoderes, de la corrupción en un mundo parecido al nuestro. Cuando sus dobles son transportados de otra realidad a su planeta por un extraño visitante, se convertirán en una amenaza para el CSA. ¿Podrán imponerse el Sindicato del Crimen a la Liga de la Justicia de América? ¿Y podrán extender su maléfico dominio al mundo de Superman, Batman y Wonder Woman?"

En DC Cómics es un recurso habitual el crear historias basadas en otros universos, o Tierras. Por otro lado, Grant Morrison tiene una mente que roza la grandeza y el desequilibrio. Así pues, la combinación de estos dos factores da como resultado JLA: Tierra 2.

La trama nos lleva a un primer encuentro con la JLA, la de nuestra Tierra, con un Luthor armado hasta los dientes, él cual les habla de la Tierra de la cual procede. Nuestros héroes descubren así un planeta habitado por dobles  suyos pero con una pequeña diferencia: los buenos son malos, y los malos son buenos. Gracias Morrison, solo una mente como la tuya puede llevar a cabo una idea tan suculenta como ésta.

El argumento no tiene puntos calientes hasta la parte final, donde se descubre que todos los villanos de Tierra 2 son controlados por *******. Pero a lo largo de la historia vas recibiendo pequeñas dosis de guiños a eventos pasados, u otros héroes de DC.

El guion de Grant Morrison es correcto. No desentona en ningún momento, y consigue engancharte desde las primeras páginas. El recurso del espejo es llevado a cabo con conocimiento, y no a lo loco. Porque podría haberse cometido el error de poner a los héroes y sus contrapartes una enfrente del otro y ocupar páginas y páginas con algo que visualmente llama la atención pero nada más. Así que, punto para Morrison.

El dibujo me tuvo enfadado varios días, sí. En general es muy bueno: los personajes, los escenarios, las escenas de lucha... Pero, por favor, Quitely, explícame porque tus personajes masculinos parecen estar siempre con los morritos fuera, y los femeninos con un único labio pintado y cara de estreñidas... Es la única pega, y creedme que intenté acostumbrarme al dibujo de las caras por parte de Quitely, pero nada...

En resumen, una buena edición de ECC. Casi obligada, ya que todo lo que toca Morrison te suele provocar varios sentimientos encontrados. Como digo, una historia amena y muy recomendable.

Sin más, me despido hasta la próxima reseña express ;)